Cómo decorar un jardín con flores de primavera
Afortunadamente nuestros jardines se han convertido en la vía de escape para muchos de nosotros. Un espacio donde hemos pasado alguna que otra hora leyendo, teletrabajando o simplemente disfrutando en familia de los rayos de sol que nos brinda la primavera. Por este motivo hemos pensado en daros una serie de consejos que os pueden servir de ayuda para mejorar la decoración de vuestro jardín.
¿Qué flores de primavera plantamos en nuestro jardín?
Una de nuestras flores favoritas es el Jazmin. Tanto por el blanco de sus flores, como por su olor característico hará que salir al jardín sea toda una experiencia para los sentidos, transportándonos con aires del sur de la península, literalmente a la Feria de Málaga, donde es tradición regalar biznagas a nuestros acompañantes. Su olor increíble, no solo inundará nuestro jardín, sino que se colara por las ventanas de nuestra casa llegando a cada rincón.
La época perfecta para plantar el Jazmin es la primavera, siendo su época de máximo esplendor el verano.
Las Primulas, son este tipo de plantas que nos alegraran la vista en cuanto nos asomamos por la puerta de nuestro jardín. Se trata de una planta muy colorida y de fácil cuidado. Aparte de prímula se la conoce como primavera, por lo que será ideal para nuestro jardín primaveral.
Las Hortensias son visualmente muy espectaculares, de porte alto, culminan con un sinfín de flores entrelazadas que no podremos evitar quedarnos embobados mirándolas. Su variado colorido las hace tremendamente atractivas a la hora de decorar nuestro jardín.
Hemos elegido estas tres, pero existen muchísimas más plantas que harán las delicias de los amantes de las flores primaverales.
una vez que tenemos las nuevas flores con las que daremos un nuevo aire a nuestro jardín, tenemos que saber donde las vamos a plantar. Evidentemente solo hay dos posibilidades. En primer lugar, plantarlas en el suelo, o en macetas.
Si las plantamos en el suelo, tendremos que valorar la opción de completar la tierra natural con algún tipo de abono, para que complemente la cantidad de nutrientes que recibe nuestra planta. En el mercado existen distintos tipos de abonos, pero siempre recomendamos pedirle consejo a un especialista, el cual nos ofrecerá la mejor solución a las necesidades propias de nuestro terreno.
La otra opción de plantación es a través de macetas. Si tenemos el suelo hormigonado o simplemente vemos ésta como la mejor opción, podremos colocarlas en macetas.
Como nosotros lo que queremos es darle un aire fresco a nuestro jardín, buscaremos alguna solución original, que no sea el típico macetero marrón de siempre. En este caso lo que proponemos son maceteros de tonalidades blancas o grises claras, para que la única que sea la protagonista sea la flor. Las formas del macetero, ahí sí que lo dejamos a vuestra elección, pero os dejamos la pista, reciclar algún objeto de vuestra casa, dará al jardín un toque único muy primaveral.